Es una realidad que el mundo en que vivimos gira vertiginosamente y que día a día nos esforzamos por seguirle el paso.
Tanto en el ámbito empresarial como familiar, cargamos con grandes responsabilidades y nos es demandado un alto grado de eficiencia al igual que resultados y si a todo esto le sumamos los estresantes económicos por los que tanto el país, la empresa y la familia transitan, es muy fácil de explicar por qué estamos estresados, ansiosos o nos sentimos inseguros.
A lo largo de nuestra vida, todos los seres humanos vamos desarrollando talentos, habilidades y capacidades, entre ellas la resiliencia, que no es más que la capacidad que tenemos los seres humanos de sobreponernos a experiencias adversas. Sin embargo, es tanto y tantas las situaciones emocionales con las que día a día tenemos que lidiar, que por más resilientes que seamos, algunas emociones se van almacenando, la mayor parte de las veces sin darnos cuenta.
Y como es de esperar, se alcanza un punto en el que la capacidad de almacenamiento llega a su tope y el contenedor comienza a desbordar, dicho en otras palabras “es la gota que derramó el vaso”. Es justo en ese momento, donde aparece la sintomatología: nos sentimos aún más estresados, con miedos y ansiedad, tristes o deprimidos y quizá hasta comenzamos a reaccionar con ira. Desafortunadamente esto no se queda ahí, ese cocktail emocional nos hace sentir desmotivados y hasta devaluados, restándonos aún más energía, tanto física como emocional.
Sin embargo, esto no lo es todo, el cuerpo comienza a reaccionar y lo manifiesta de diversas y diferentes maneras, ya sea en forma de dolencias físicas, problemas articulares, contracturas, palpitaciones, aumento de la presión arterial, gastritis, alteraciones en el peso, alergias, insomnio, falta de concentración, etc., la lista puede ser interminable.
¿Y qué crees? Cuando llegamos a este punto, ¡ya nos encontramos totalmente bloqueados y atascados!, por lo que es importante pedir ayuda.
Una gran ayuda puede ser EFT (Técnicas de Liberación Emocional) o Tapping, que es una de las terapias utilizadas y que por sí sola o como terapia complementaria funciona donde otras más sofisticadas no han tenido éxito, observándose resultados desde la primera sesión.
Es una técnica indolora y amorosa basada en la Acupuntura, pero sin agujas, la cual se practica dando pequeños golpecitos con la punta de los dedos en determinados puntos de los meridianos energéticos localizados en el cuerpo. Se sabe que que por su sencillez y eficacia puede ser practicada por niños, adultos y adultos mayores y que con la constancia y práctica, se convertirá en una herramienta de sanación emocional para toda la vida.
La terapia con EFT va directo a aliviar el malestar emocional y físico, como puede ser:
*Estrés *Miedos *Ansiedad *Tristeza *Depresión *Insomnio *Culpa *Recuerdos dolorosos *Resolución de Duelos *Dolencias Físicas y Emocionales *Combate antojos *y mucho más . . .
La invitación es a darte la oportunidad de probar y comprobar esta técnica. Si quieres conocer más sobre el tema, sólo tienes que solicitar una cita de exploración sin costo.
